Salvarle a alguien la vida para destrozársela tú.


sábado, 30 de abril de 2011

Absurdo

No queda más remedio que volver a construir todo lo que se derrumbo, me dijo alguien. Y en ese instante entendí esa frase de levantarse y apoyarse en los demás. Sin embargo, últimamente adquiere otro sentido, un tanto más individualista. A veces puedes pararte a observar como la gente se mueve y darte cuenta del enorme egoísmo y de la eterna deuda con los otros que tendremos hasta que dejemos de respirar. Es algo paradójico, como la vida y el recuerdo de los muertos.

Crime of the century

Y me explicas eso de que a ti te encanta ser otro diferente. Y entonces yo te pregunto porqué. Siempre es tan complicado como fácil contarlo, pienso. Y tú me hablas de todo lo que harías si no fueras tú, y de todo lo que contarías si no cargaras con el lastre de la moralidad. Se ve que es algo que nos enseñaron de pequeños y ahora ya no podemos deshacernos de él, aunque lo neguemos, aunque lo ocultemos tras nosotros mismos. Suele ser algo complicado dejar la mente en blanco y tratar de buscar únicamente lo que deseamos y anhelamos que fluya por nuestras venas, de hecho quizá es algo imposible. ¿Y porqué? La moralidad, con tantas cosas más, parece ser el crimen de nuestra era.

Fácil

Lo contaré deprisa para que lentamente llegue 
a tu sonrisa 
y no se pueda perder ni una vez.

martes, 26 de abril de 2011

Y aunque me lo jures, yo no sabría que decirte

Mi abuela siempre me ha dicho que el movimiento de los borreguitos en el cielo trastorna su estado de ánimo. Desde que tenía tres años lo repite siempre que voy a su casa, y después me mira con esa cara suya, ¿Como decirlo? Yo sé que vosotros lo sabéis pero no sé explicarlo. Esa cara de abuela, esa carita que te pone y que te mira como su fueras un dulce que se pudiera comer. No sé si me explico, algo así. Pues cuando terminamos de merendar el correspondiente café y sus roscos de azúcar en la sala de estar esa tan pequeña en la que estamos siempre todos me dice que los borreguitos del cielo no la dejan tranquila. Y desde que tenía tres años me preguntaba que era eso de los borreguitos en el cielo y porqué molestaban a mi abuela. Y en mi cabeza se acumulaban más y más preguntas que llegaban a colapsarme ya que yo no sabía contar ni siquiera hasta diez y entender que eran los dichosos borregos del cielo era sumamente complejo. Preguntas como porqué estaban en el cielo si mi imaginación sólo se veía a unos borregos pastando en la hierba, o porqué le producían a mi abuela dolor de cabeza sino ladraban como los perros o cantaban como los loros, en fin, cosas simples de esas que se piensan. Fue una cuestión complicada por aquellos entonces. Sucesivamente y tiempo más tarde mi abuela me preguntó si realmente sabía lo que eran los borreguitos en el cielo. Y no. No penséis que le dije que no. Le dije que sí. Que sabía perfectamente lo que eran y ella continuó con aquellos cambios de humor que le producían los borregos del cielo. Y así pasaron los días y el tiempo y las tardes en casa de mi abuela, con aquellos borreguitos en el cielo que tanto me calentaban la cabeza cuando yo no sabía ni siquiera que diablos había allá arriba que daba tantas vueltas.
Necesito que te acerques a mi lentamente para que pueda sentir poco a poco como tus dedos se enlazan entre mis dedos y tu boca se aproxima a la mía.
Apresúrate lentamente

Compendios oxidados

Apunto las cosas porque sé que un mínimo detalle podrá hacerme sonreír después, y yo creo que sonreír es muy importante, tanto que incluso deberíamos pensar cuantas veces sonreímos al día y aún así, deberíamos proponernos duplicarlas o triplicarlas, y si eres un gran aventurero quizá piensas en quintuplicarlas. Sí sí, no te engaño. Apunto las cosas siempre que puedo en el mismo calendario (siempre que me acuerdo). Digamos que lo hago para no olvidarme de los días en los que sucedieron esos detalles tan bonitos y tan pequeñitos que adornan, comencé a hacerlo porque dicen que los días, los números en este caso son muy importantes (aunque yo los odie), y si lo dicen, tendrá que ser verdad ¿no?
El amor que siento por ti es como los números, llega al infinito y al tratar de contarlos, te pierdes en él.
Abrir un huequito para el aire pero seguir allí metida, allí bajo las sábanas con esa música tan triste, esa que siempre hace que pienses las cosas de una manera más amarga.
Las palabras son sencillas, lo que carece de sentido son las ideas
Cuando seas padre comerás huevos
¿Y tú eres padre?
A mi no me gustan los huevos

sábado, 23 de abril de 2011

¿Estás harta de tragar mierda y callar por los demás?
Bienvenida al mundo de las relaciones entre personas querida

viernes, 22 de abril de 2011

El amor de Dartacán es para Julieta

Trust me

-Te perdono -afirmé firmemente mirándolo a los ojos-
-¡¿Me perdonas?! ¡¿Como que me perdonas?! -exclamas tú-
-Sí, tranquilo, te perdono -repetí con claridad-
-¡Pero si soy yo quién debería perdonarte a ti! -recalcas tú-
-Escúchame, te perdono por perdonarme -aclaré despacio-
-Pero si aún no lo he hecho -me dices un poco confundido-
-Mírame a los ojos y dime que harías -dije acercándome a ti suavemente-
-Te perdonaría -confiesas rozando mis labios-
-¿Porqué? -pregunté-
-Porque te amo -susurras tú-
-Ves -dije huyendo de ese beso- sé que lo harás y perdono tu error de perdonarme -sonreí-
-Perdonarte no es un error, estar contigo es lo único que me da la vida -afirmas tú-
-Pues así nunca te desharás de mi -te aconsejé una vez más- 
-Es la intención -respondes tú, robándome finalmente ese beso-

Tú aquí, tú allí

You're a lucky person
You're so cute, adorable
You should see yourself with your eyes
Y supongo que debería darte las gracias pero sé firmemente que nunca entenderás todo lo que significas para mi porque es un significado que abarca la inmensidad. Olvídate de lo que piensas; olvídate de lo que crees; únicamente escúchame. No soportar la idea de perderte no es simplemente haberme acostumbrado a ti, y a mi vida contigo y a los días y a tus miradas. Pensar en la idea de que no estés tumba mi alma y hace trizas mi corazón. Y no lo quiero si no estás tú. ¿Y sabes porqué? Porque soy afortunada porque estás tú aquí. Porque soy feliz porque estás tú aquí y mi vida brilla porque estás tú aquí. Porque los días son hermosos cuando estás tú y las noches son doblemente perfectas si puedo rozar tu piel. Y no es únicamente haberme acostumbrado a ti y a mis sueños contigo, y a mis sonrisas y a tus abrazos por la espalda. Porque cuando cierro los ojos quiero que estés tú aquí. Y nada en el mundo me llena tanto de felicidad como ese momento en el que yo noto que de verdad me quieres y de repente ya nada me importa. Sólo tú.
¿Cómo llamarlo engaño si sé que no tienes dueño, 
si a veces haces parecer que viva 
en un sueño?

Vámonos, que es mejor

Y entonces ante ti se establece una encrucijada. Y sientes un inmenso alivio cuando observas esa sonrisa pero al mismo tiempo hay algo pesado sobre tus hombros. Y entonces tienes que decidir que hacer y hacerlo rápido, ya que parecer ser que el reloj mueve las agujas velozmente. Y allí estoy yo sin entender porque tengo que elegir entre dos sensaciones que abarcan mi mente. Y quiero decirte que necesito que me mires pero no puedo dejar de sentir la sangre corriendo por mis venas. Y voy a besarte y me esquivas, y yo aparto la mirada esperando que me abraces; pero no lo haces. No lo haces porque estás cansado. Lo comprendo. Yo también.
Y de repente se establece la relación esta de quererte tanto con el miedo de asustarme y me trago el orgullo. Y ahora que lo pienso se me está llenado el estómago de orgullo y no estoy muy segura de cuando ni en qué momento subirá a mi boca.

Decadencia

Y es la primera vez en la vida que tengo que pasar Clandestinos del reproductor porque simplemente hoy no me calma. De hecho me altera. Y esa canción ha calmado cada uno de mis días ya que me recuerda recuerdos. Es una sensación rara, pero creo creer que no es buena. Y no es buena porque no me siento bien, aunque no sé muy bien el motivo de ello. Supongo que se llama preocupación. Y estoy cansada de cansarte por preocuparme por ti. Un tanto ilógico; como frustración por frustrarse. Déjalo, seguramente será algo nimio.
A partir de ahora 
voy a preocuparme 
por el vecino

Cuadros rojos

Porque solo tú creces como flor en el desierto y me das vida, dentro de este mundo que pintamos con las manos del amor en el lienzo del ser humano

La vida viene va, y se va

Y lanzar besos al aire que quiero 
que recuerdes muchas noches
Y lo peor, lo peor son las despedidas. Ese irse de una manera tan sutil. Ese abrazarse y con una sonrisa saber que de nuevo se separan los caminos. Es un querer intenso que se escapa entre tus dedos. Y lo peor, lo peor sin duda son las despedidas. El la primera imagen que recuerdo y la única que desecho al instante. No me gustan las despedidas. Las odio. Son bonitas pero a la vez son horrorosas. Y duelen. Y duelen por el mero hecho de que se llevan cachitos de tu corazón, y siempre lo hacen ya que únicamente duelen las despedidas de la gente que realmente quieres. Y yo a ti te quiero. Y te quiero mucho. Y lo peor, lo más duro de tragar son, sin duda alguna, las despedidas.
Echaré de menos esas lluvias de miradas cómplices entre (2ª generación), (3ª generación) y yo.
I'm gonna miss this night

Pues eso va a ser

Me fui mal pero no creo haber vuelto mucho mejor. Todo lo que puede salir mal, saldrá mal. O eso he oído decir. Pues bien, yo creía que iba a seguir lloviendo, que la gente se iba a quedar en su casa y que después yo iría a la mía. Pero no. No siguió lloviendo ni la gente se quedó en su casa. Y por primera vez en toda la semana estábamos todos juntos. Bueno, casi todos juntos. Y yo pensé en eso de apoderarme de las sonrisas de los demás pero se ve que me harté. Y supongo que salí mal, pero no sé ni siquiera como he vuelto.

miércoles, 20 de abril de 2011

Anyway, I hate this


Yo te lo digo por tu bien
Deja de decirme que lo haces por mi bien
Es la verdad
Lo sé, por eso me jode

Esa es la cuestión

Y siempre que estás tú aquí hay algún problema. Siempre. Y por nimio que sea tú coges tu frustración, la amasas y se la pegas, y entonces parece (te parece a ti, porque los demás seguimos pensando que es una chorrada) que es lo peor que te podía pasar y que la gente se confabula a tu alrededor para amargarte. Y no. Tú eres la amargada. De hecho estás amargada desde que te conozco. Así que deja de dramatizar y de pensar en ti. Egoísta. Y desecha esos humos que tienes y que rondan por las esquinas a cada momento, que eso no es bueno. No es bueno para nosotros, pero sobretodo no es bueno para ti. ¿Y porqué? me preguntarás, pues únicamente por el hecho de que se te está escapando la vida. Y resbala entre tus dedos agrietados mientras tú no dejas de crear bolas enormes de problemas y de rencores por doquier. Y llegará el día, querida, y créeme que no está tan lejos, en el que te preguntes que has hecho con tus días.

lunes, 18 de abril de 2011

Unidos por lo invisible

Tú y yo estamos vinculados. Autorizar no es una necesidad. Tú no lo necesitas; yo no lo quiero. Es una dualidad cuerpo/alma como decía Platón, algo que nos une pero que no se ve, algo extraño y que se torna misterioso. El albor me seduce como tú lo haces constantemente. Una inmensidad suave y sabia que pretende hacerme perder los estribos, los escasos que poseo. Tú y yo estamos vinculados con un hilo imperceptible que acerca nuestras manos hasta poder sentir nuestra piel, algo singular que no se puede controlar. Es excepcional debido a que tú lo eres. Quizá con más profundidad de lo que nunca llegarías a concebir. Y sí, al igual que los muertos al recuerdo, existe un algo peculiar que me despierta por las noches con el mero objetivo de pensar en ti.

Ya, pero me jode

Más pronto o más tarde todos somos el perro de alguien.
Es esa puta dependencia absoluta e irracional que persigue a mi razón segundo tras segundo. Es esa odiosa sensación de sentirme incompleta, un ir y venir vacío que no lleva a ningún lado. Y las calles están vacías, el aire está vacío; incluso el paisaje se observa vacío. Odio odiarme por eso pero no me queda más opción que hacerlo. Es ese estúpido e inútil ambiente de desdén que habita en mi pecho a lo largo de la eternidad. Y sé que es mi culpa, que estoy presa, desvalida, que ya nada va a cambiar eso y que por mucho que lo intente seguirá así hasta el fin del mundo. Y es malo. No es de esas cosas que ni son malas ni buenas sino que simplemente son así. Esto es malo. Es malo porque no es bueno depender de alguien. Y sé que nadie se lo va a llevar, que no me lo van a robar, que permanecerá aquí, aquí en mi pecho y dentro de mi corazón. Que continuará embriagando las noches y quitandole belleza a los atardeceres cuando estoy sola y a esos pequeños detalles que yo creía..., sí, de esos que yo pensaba que eran intocables y que permanecerían así.

¡Ahhh!

NADA RESPONDE

domingo, 17 de abril de 2011

Todo se gasta

Se gasta el agua, se gasta el dinero, se gastan las monedas, la luz, se gastan los días, los instantes, se gastan las letras, se gastan los atardeceres, se gastan las lagrimas, se gasta la corriente, la luna, esa estrella, se gastan las baldosas del suelo, los francos en Francia y también las noches eternas.
¿Quién sabe porqué se gastan las cosas? ¿Porque se agotan? ¿Porque se cansan? ¿Porque se mueren? ¿Porque no quieren servir más? ¿Porque conspiran entre ellas? ¿Porqué se gasta la batería? Y todos me responderán que porque se usa. ¿Y porque usarse conlleva que se gaste? ¿Hay alguien ahí que pueda contestarme a estas preguntas? Bah, dejadlo, creo que necesito enchufar el cargador.

Así es

-Oye... ¿Si tu tuvieras que vivir tu vida infinitamente y para siempre una y otra vez que me dirías?
-¿Como que vivir mi vida para siempre?
-Sí sí, volver a vivirla igual, sin omitir nada, con los mismos momentos, con los mismos detalles, impresiones, casualidades, exactamente de la misma manera... ¿Que pensarías?
-¿De dónde te has sacado eso?
-De una película de Nietzsche
-Nietzsche era un hipócrita
-Quizá un tanto, pero vivió su vida enfermo, supongo que tiene justificación.
-La tenga o no... a mi me sigue pareciendo un falso, afirmar algo que tú ni siquiera intentas es hipocresía.
-No digas eso, y bueno qué, ¿Que me contestas entonces?
-Pues no me gustaría.
-¿Y eso porqué?
-Pues supongo que hay momentos en mi vida que no me gustaría repetir
-Pues entonces, amigo mío, no lo estamos haciendo bien.

sábado, 16 de abril de 2011

Entro en un estado tan perfecto...
y encuentro que hay un lado casi opuesto

Podría estar justo aquí

Y estoy segura de que en Brunswick habrá mucha gente. Y en Irlanda. Y en Nueva York. Y en la India, en Egipto, en Cazorla, en Baleares, en Italia, en Estrasburgo, en París, en Szigliget, en Suiza, en Oxford, en Argentina o en Basilea. Estoy segura de que en todos los lugares hay mucha gente. Muchísima además. Tanta que nunca podría entretenerme en contarlos uno a uno. ¿Pero... sabes qué? Que me da igual la gente que haya en Dublín, en Montecarlo, en Asia, en China o incluso en Hungría porque mi media naranja; o mi medio limón, como a mi me gusta decirle, yo ya lo encontré.
(y está tan cerquita mía que puedo suplicarle que no se eche ese perfume que me pierde)

Complazca-me

dame de comer tu amor

Ocurren cosas que nunca ocurrían

Y ocurre que de repente ocurren cosas que a ti nunca te pasan. Bueno, al menos a ti no te suelen pasar, aunque alguna rara vez se dio el caso. Y entonces dices: ¿Pero que demonios se ha fumado el cosmos para otorgarme este gran honor? Y de repente el cosmos dice: Mira chiquita, voy a hacer que sucedan cosas que antes nunca ocurrían, pero que sepas que en cuanto se me pase el efecto este, volvemos a la normalidad. Y supongo que la normalidad está ahí en la esquina de la cuarta calle de tres manzanas más arriba pero, aún así, tú no vas a ir a buscarla. No vas a ir porque te gusta eso de que de repente ocurran cosas que antes nunca ocurrían, y sí, es un tanto extraño porque sientes que es demasiado bueno y que en cualquier instante el cosmos dictará sentencia y volverá a esa odiosa normalidad que tanto detestas, pero entre tanto, intentarás buscar que coño se fuma el cosmos para dárselo copiosamente y a granel. 

viernes, 15 de abril de 2011

Debido a ello; gracias

Es de agradecer ver esa sonrisa entre tanto y cuando, bastante bonito y necesario para continuar. Sabes que aunque lo desees quizá mañana todo cambie, pero esos instantes y esa charla de complicidad no te la quitará nadie. Es extraño ya que ese tipo de cosas nunca pasan, al menos a ti nunca te pasan, supongo que es una prueba de que lo inexistente es puramente imaginario. Y la verdad, es una confirmación más de esa magia sutil de la vida.

jueves, 14 de abril de 2011

No soporto ver en tus ojos el concepto preocupación.

Suficiente

Me acaba de derribar un soplo de aire frío. Una sensación triste que acaba de envolver mi mente y no me deja concentrarme. Un tanto estúpido y a la vez conciliador. Debería aprovechar estos últimos momentos del día para repasar y asegurar ese futuro del que siempre habla mi padre, pero no, pese a eso yo estoy aquí escribiendo cosas tontas sin saber porqué. Quizá sea porque lo necesite, porque me haga falta, porque la frustración está alcanzando límites insospechados, porque la vida acaba de adquirir un nuevo sentido y justo acaba de perder ese bonito manto de ilusión con el que la veía. Puede que sólo se trate de un mal momento, seguramente lo sea. Quisiera volver a encontrar la pureza. Algo que alumbre un poco más sin cegarme a lo largo de estos dichosos instantes. Y me acaba de derribar un soplo de aire frío, un algo extraño que poco
a poco me ha hecho deambular con desdén por esas ruinosas preguntas sin respuesta que jamás sabré contestar.

miércoles, 13 de abril de 2011

Y entonces te preguntas si es verdad aquello que dicen, eso de que eres mala e insensible. Eso de no comprender o de no permitir un brote de felicidad en el corazón del mundo. Te preguntas y te replanteas sino deberías callar. Pero callar de forma rotunda y asfixiando tanto los miedos como los deseos de gritar. Callarse y no decir nada que pueda molestar. No hablar para no herir, o en su defecto hacerse malinterpretar. Lo peor de la ignorancia es, que a medida que se prolonga, se torna a confianza, una especie de ilusión que aparenta que se sabe de todo, y que de ese todo se sabe bien. Es algo odioso y repugnante. Y entonces en ese instante te llevas las manos a la cabeza y te vuelves a dudar que pasará de aquí a unos cuantos años con todo este mundo que te rodea ya que está claro que no serás la misma porque, quieras o no, deberás  alardear sin mala intención y, aún sabiendo que deberías callar, que te sientes obligada a decir la verdad por mucho que joda.

lunes, 11 de abril de 2011

No me dejes ser solo a medias
                                                                          Envuelveme con tu otra mitad

Parece mentira, en algún rincón


Y entonces me arrinconas, y me besas, y me tocas suavemente y tú dices con esa sonrisa pícara;
-Eso se lo dirás a todos y les harás 
muak muak muak muak...
-Sí, a todos -contesto vacilando, 
y un instante después afirmo- Tú eres tonto
-Ya -respondes-
-¿Te lo han dicho alguna vez?
-Alguna que otra
Y entonces yo te miro con cara de incrédula y tú dices:
-No me has dicho que no
-¡NO! -grito-
-Si si, ahora saltas con esas -contestas burlandote de mi, ahora tú-
Y me arrinconas, y me besas, y me tocas suavemente y entonces yo curioseo algunas cosas y te digo eso de ''¿Me lo contarás la próxima vez que nos veamos?'' y tú dices eso de ''Naturalmente''; ''Que sí'', añado yo, y tú te quejas de lo que ya te voy conociendo y así me besas y te vas, pero tranquilo, yo tengo buena memoria 
recordando esas nimiedades tuyas
 que tanto me encantan.
Haces que se me pasen las horas 
y salga el sol (8)

sábado, 9 de abril de 2011

El tiempo no muere jamás

Verá, usted no tiene los huesos de cristal. Podrá soportar los golpes de la vida. 

Comptine de la vie


Sólo recordarás aquello que no hiciste, que dejaste, que olvidaste. Únicamente podrás ser feliz persiguiéndote  a ti mismo y dejando atrás lo que no te ayuda a crecer, a aprender, a soñar. No te rindas. Sólo lo conseguirás si luchas fieramente, con entereza, sin desdén. 
Lucha por tu futuro. Lucha por tu libertad.

Amélie

Son tiempos difíciles para los soñadores
Usted tampoco podría ser una alcachofa, por que incluso las 
alcachofas tienen corazón

En todo caso, el amor te hace guapa

Siga las flechas azules. 
Observe lo que se mueve a su alrededor.
 Tome pequeños sorbos de ese café.
  Yo sé lo que hará. 
Dejará la cucharilla en la mesa, tomará el azúcar con los dedos y finalmente se marchará. 
Quizá en ese resquicio de soledad podemos coger un lápiz y escribir uno a uno todos los detalles de esa persona que sueña en nuestros sueños. No sé. Una expresión, una frase o una forma de caminar. Un indicio de que nos ama, una noche que vive en nuestra alma, una sonrisa o un ápice de su perfume. 
Yo sé lo que hará.
Manténganse expectante.
Acaricie su rostro con la yema de los dedos.
Huela su piel.
En todo caso, mademoiselle, 
el amor te hace guapa 


Ay señor, que pesada es esta espada 
que desenvaino con sudor, 
la soledad del príncipe ...sin reino
la soledad del hombre... sin calor

Peinarse el alma

A veces me río sola. Otras, sin embargo, me río pensando en ti. ¿Cómo establecer la relación entre lo conocido y lo que resta por conocer? Yo me río porque me haces reír, porque haces que te quiera, porque haces que tu mera presencia me haga flotar, es un reír inconsciente mágico y bobo que en realidad únicamente refleja eso de tu interior. Eso de lo que habla todo el mundo, sí sí, eso que se conoce pero no se ve, bueno, eso que se cree conocer pero que no se ha visto nunca. Es decir, al menos yo nunca he visto a mi alma. A veces la llamo, pero nunca me contesta, es una rancia. Dicen que anda en tu cabeza, o más o menos en el pecho, aunque yo creo que inunda la razón y realmente no está en ningún sitio. Y también creo que la risa es la manifestación del alma, aunque quizá lo haya leído en algún otro sitio y piense que es mío aunque no lo sea. Quien sabe, eso del alma es un tanto enigmático y nadie lo entiende. ¿Tú podrías explicarmelo? Vamos a ver, ¿De qué hablaba yo? ¡Ah si! De que cualquiera, cualquier persona que me vea reír delante tuya sabrá lo muchísimo que te adoro.
Deberíamos pensar que, por ahora, ésta es la única vida que podemos compartir

viernes, 8 de abril de 2011

Ahoguemos el suelo de tanto saltar.

Es una sensación que impacta. Impacta porque sabes que siempre querrás a esa amiga que ahora está lejos pero que volverá y con la que estás segura de poder vivir eternamente. Y quieres volar. Volar junto a ella, perdón, junto a ellas. Y dejarse llevar. Dejarse llevar por el agua, por el sol, por las sonrisas, dejarse llevar por las risas, por los retos estúpidos que hacen gracia, dejarse llevar por la vida, dejarse olvidar un rato. Aparecer en un lugar y que llueva amor. Amor y cariño que abarca la inmensidad de lo conocido y por conocer, una pasión entrañable a personas tan perfectas que duele al mirarlas, un desbordarse de felicidad en un instante; un querer querer. Una cosa rara. Que sólo puedes entender tú. Bueno tú, tú y yo misma. Os adoro marca de almohada.
I just wanna be ok; be ok; be ok
I just wanna feel the day, feel the day
I just wanna feel something today

jueves, 7 de abril de 2011

Hipocresía versión 2.0

Deja de creerte que me conoces, porque no lo haces. No sabes lo que me gusta ni lo que pienso o  lo que intento pensar, tú ni siquiera atisbas porqué me callo cuando algo me molesta. Y me callo porque a mi no me gusta discutir y sólo lo hago lo estrictamente necesario para que el mundo siga girando en la dirección correcta. Porque me da igual que el mundo entero me conozca o no, yo sé de esas personas que leen mis ideas con tan sólo mirarme a los ojos, y esas, esas y no tú son las que saben realmente lo que soy y en qué me quiero convertir. Deja de intentar agradarme, de mirarme como si pudieras escucharme eternamente y entender en lo más mínimo mis palabras, deja de reírte de mis frases como si pudieras captar el doble sentido que sólo se puede saber habiendo vivido conmigo más de un año y más de dos, y conociéndome, y recordando esas pocas veces que yo he llorado frente a alguien. Y no. Tú no me has visto llorar. Tú no me has visto llorar como tampoco me conoces así que, por favor, deja de creerte que eres alguien importante en esta ruleta rusa llamada vida, porque no es así.

miércoles, 6 de abril de 2011

Nous n'en savons pas

No sabemos lo que es el tiempo, 
aunque siempre vamos con reloj;
no sabemos lo que es la realidad, 
aunque siempre andemos sobre ella.

JÁ, JÁ ;)

-Tú andas con ventaja; jugar con dos cartas debería penalizarse por trampa.
-¿Dos cartas? ¿Qué dos cartas?
-Tu vida y la mía.
-Tu vida es tuya y creo que podría afirmar lo mismo desde aquí.
-JÁ ;)
En Texas Hold Em la mejor mano es 
llevar doble pareja de as
(la tuya y la mía)

Cero partido cero

Estudié mientras dormías, 
y descubrí que, al aplicar L'hôpital en una indeterminación de la vida, tú y yo tendemos a más infinito en un 
para siempre.

martes, 5 de abril de 2011

Monigoturas :)

Porque yo no soy como los demás. Yo no soy buena o mala, torpe o hábil, grande ni pequeña, yo no decido y ya está. No siempre me gustan las mismas cosas, exceptuando la lluvia y esas sonrisas bien temprano por la mañana, aunque quizá el martes me agraden los detalles que me encantaron ese sábado. A mi me gustan los jueves, pero también los lunes aunque parezcan pesados. A mi no me gustan las etiquetas, las generalidades, lo común, lo rutinario. Me gusta que el sol brille en el cielo pero me encanta más aún que las gotas que lloran las nubes empapen mi pelo; me fascina gritar muy alto pero a veces me deleito en el silencio con mi más profundo pensamiento y esas estupideces tan características de cada monigote que habita en el mapa. A mi, a mi me gustan los elefantes azules, las amapolas naranjas, los libros de biología y las teorías sobre el origen del universo que hacen tender de un hilo la fe que me inculcaron de pequeña. Y quiero seguir siendo pequeña. Yo quiero crecer, pero seguir siendo una niña. Yo quiero soplar velas pero permanecer estática en un momento, en un instante eterno de vosotros y de cada milésima de minuto que hacemos planes para ver que luego ninguno se cumple como lo previmos. Y quiero, quiero con la máxima voz que pueda salir de mi garganta gritar que yo no soy como los demás; porque para mi, cómo decirlo, no existen sentimientos, sino personas.

sábado, 2 de abril de 2011

Date a conocer

Eso de ''ahora me río, pero vamos, en ese momento...''
Pues yo quiero proponer al mundo entero que en ese momento se rían. Yo quiero pintar las señales de magenta y hacer que el suelo brille de naranja, yo quiero escribir un libro que lo lean mil personas, ni una más, yo quiero verter en las piscinas patos amarillos de goma, como en ese anuncio de la tele. Yo quiero que me mires y únicamente pienses en lo que soy, en lo que soy en este momento, quiero contemplar que piensas en mí como alguien presente. Yo, aquí, ahora, esperemos que siempre. Quiero que veas mis ojos verdes y me cuentes eso de... ''ahora me río, pero vamos, en ese momento...''

viernes, 1 de abril de 2011

¿Nunca has sentido eso de mirar alguien y decir...
 ...joder, como he conseguido 
yo este pedazo de bombón?

Ilógica, oh sí, esa soy yo :)

Desde aquí desde mi casa las cosas se ven algo más grandes, es decir, me refiero a que el exterior parece peligroso cuando ignoramos lo que hay en él. Como un laberinto del cual no sabes si saldrás ni los caminos que llevan a más caminos que resulta que no tienen salida. Desde pequeña me han dicho que permanezca quieta y no cruce la calle sin mirar, sin embargo, yo eso me lo he (recurriendo a una frase verídica de uno de mis profesores) pasado por el arco del triunfo. La gente me regaña y me repite una y otra vez aquello de ''algún día te vas a morir'', y yo, como siempre de nuevo recurro al ''si me muero lo denunciaré por haberme atropellado''. Y no. Cuando esté muerta creo que me importará poco si ese tipo está o no en la cárcel, pero bueno, ¿De qué hablaba yo? ¡Ah si! De los laberintos y eso. ¿No? Bueno, pues que nunca entréis en uno que os vais a perder.

Huella

Y entonces una sensación te recorre el cuerpo. Una sensación extraña, una especie de sentimiento raro e ilógico que te provoca una radiante y ensordecedora felicidad. Una cosa que no viene a cuento. Una magia exasperante que te incita a saltar y a gritar muy alto que acabas de suspender. Y no sólo tú. Existe un cúmulo de personas preciosas y llenas de vida que te acompañan en ese camino, y de nuevo, y sin saber verdaderamente porqué, vas a ver un río que se recordaba más grande y te invade una evocación a algún lugar parecido antes, con esa misma emoción y esas mismas ganas de comerte el mundo y chillar y abrazar a los que te rodean, sabiendo y disfrutando de esa compañía tan preciada y sabedora de buenos momentos que adorna cada día, en parte seis horas todas las mañanas y por otra parte unas millones más.
Mi foto
My madness keeps me sane.