En estos días,
días sin sol,
noches sin luna,
ningún lugar es mi lugar
y no consigo reconocerme en nada ni en nadie.
Así pues no estoy donde estoy ni donde estuve.
Dejo mi cuerpo y me voy, lejos, a ninguna parte.
Y no quiero estar con nadie,
ni siquiera conmigo.
Te va a pasar la vida
y
yo seré
tu paz.