Y han cambiado muchas cosas.
Me ha llovido mucho encima y he acumulado cosas con las que tengo que cargar.
Supongo que he vivido alguna que otra decepción
y no hubo noche en la que no intentara tocar la luna.
Me he dedicado a tacharte, a echarte a patadas de mi pensamiento
y a volver a recordarte en cualquier sitio.
En cualquier parada de autobús, entre suspiro y suspiro.
Me he dedicado a recolectar todos nuestros momentos en un frasco transparente.
Para tenerte siempre que quiera verte, en alguna parte.
Aunque sea dentro de mi.
Me he dedicado a jugar contigo en todos mis sueños,
simplemente para que tu no hicieses lo mismo.
Sin darme cuenta de que a veces,
las ilusiones por alguien son mucho mas grandes de lo que todos imaginamos.
Y se pueden despedazar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario