Salvarle a alguien la vida para destrozársela tú.


martes, 5 de noviembre de 2013

Dos extraños que ésta noche se miran.

Sin amor, todos los besos saben a lo mismo.

Te miro a lo lejos caminando, decidido. Y entonces llegas, a la una y media de la madrugada. Bien tarde y con mucho frío. Y me abrazas cálidamente y en esos ojos verdes siento que sí que tenías ganas de verme de verdad; ¿que pasa bonita?, no te veía desde hace mil años. Sonríes. Y comenzamos a charlar de como han ido nuestras vidas, de tantos meses sin vernos, de ti, de nosotros... y en un momento pienso que te ves exactamente igual. Los mismos ojos, las mismas frases, la misma sonrisa de pícaro. Y me alegra estar ahí contigo ganando datos de tu vida, y tú de la mía. 'Las cosas me van muy bien, finalmente encontré mi camino.', te digo. Y sonríes y me cuentas que has viajado mucho y todas esas cosas que tú siempre has echo. Volar de aquí para allá, bailar, salir de fiesta... cantar. Esa vida que sólo llevas tú pero que para mi no la querría. Y te detienes en la puerta de aquel bar y fumas esa mierda para tus pulmones que es peor que el tabaco. Y ya dentro bebemos y nos reímos de mil historias pasadas y de errores que cometimos. Y hablamos de los que quedan por cometer y yo empiezo a pensar que no quiero equivocarme contigo más. Se fueron. Todas esas cosas que sucedieron y luego quisimos borrar, y las que sucedieron y no borramos también, esas ganas de besarte cuando te tenía cerca, un quiero y no puedo sin terminar. Todo eso desapareció. No sé cómo ni donde ni cuando pero se esfumó. No estaba preocupada por ello, pero tenerte delante y ver simplemente a un viejo amigo me confirmó muchas cosas que yo ya sospechaba. Entendí que a veces en la vida las cosas cambian drásticamente, y te lo dije; 'nunca llegas en el momento ni en el lugar adecuado'. Y tú te encogiste de hombros pero ambos entendimos que ya nunca iba a existir ese momento adecuado. Que pasó. Que las cosas se acaban y la vida puede volver a tener sentido. Que fue bueno tomarte. Que fue bonito mientras duró pero que sólo logró ser eso; bonito. Que me sigue gustando tu sonrisa mientras me hablas de todo lo que has echo, que me sigue gustando verte feliz y lleno de vida, pero que no. Ya no quiero besarte. 'No puedo besarte si sé en ese mismo instante que me estoy equivocando. Tengo a una persona a mi lado que no se merece nada de esto.'
Y así la gente aprende. Aprendemos. Es mentira eso de que la verdad duele. La verdad a veces no duele; simplemente es un fino hilo que deja ligadas a dos personas lejanas y extrañas, porque si, al fin y al cabo un beso no descubre nada del otro. Fuiste y serás un gran amigo, un gran apoyo en malos momentos, un gran abrazo mientras lloraba, y siempre te lo agradeceré; que me sonrieras, que me abrazaras fuerte para que no me rompiera, que me besaras con cariño, que me secaras las lagrimas cuando estaba rota, que vinieras a hacerme reír mientras me moría por dentro. Y te miro de lejos caminando, decidido. Y sé que la vida para algunos ya ha dejado de tener alma sin esa persona que te ríe las tonterías y te arropa las miradas. Y no. Lo siento pero no eres tú. Dejemos que el pasado nos siga recordando aquel viaje, aquella gente, aquel momento de magia y esos que nadie sabe pero que tú y yo sí. Disfrutemos de saber cómo nos está tratando ésta vida tan larga y tan corta a la vez. Y seamos felices, pero separados. Cada uno con su trocito de luz (el cual yo ya encontré), tú hazme caso, ya llegará el tuyo. Sólo quería decirte que me gustó mucho saber de ti y poder mirarte a los ojos.. pero que firmemente creo que nunca he sido tan feliz con alguien, y ese alguien no eres tú. Te quise lo suficiente para no olvidarte nunca. No me olvides tú y sigue viviendo como has estado haciendo hasta ésta misma noche. Por último, canta siempre;

Do you know the Muffin men who lives in Gantinkow? 
 ♪         ♪  





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My madness keeps me sane.