El mapa de mis tesoros

Si me robas el mapa del país de los sueños tendré que inventarme el camino. Tendré que investigar los senderos ocultos que hay desde el cielo hasta Marte, y explorar los rincones de los mares, con sus sirenas y sus peces de colores. Tendré que trazar algunos bocetos, medir con regla los escondites y sus tesoros llenos de oro y diamantes, mirar cómo se mueven las nubes e intentar describir su trayectoria después. Tendré que observar los lunares de tu piel y fijarme en las fotos de aquel viejo album, trás la caja de madera en el desván. Tendré que volver a soñar con las hadas y las burbujas de jabón. Y aprender, aprender nombres, lugares y sitios... pero... ¿Sabes qué? Creo que finalmente me devolverás el plano de los recuerdos que cobija todos mis silencios... y... ¿Sabés porqué? Porque el mapa del país de los sueños es sólo mío. El de mi vida. Tu quizá tengas el tuyo. Quien sabe ¿No?

Yo no soy esa persona

-¿Podrías enseñarme? -preguntó mirando mis ojos-
-No -contesté rotundamente- Yo no soy la persona adecuada
-¿Por qué no? -insistió él-
-Eso te corresponde a tí -dije poniendo el mayor énfasis que pude-
-Quiero aprender -susurró-
-Debes hacerlo solo
-¿No podrías enseñarme al menos cómo consigues ser así?
-No -repetí- No soy la persona adecuada
-Me gustaría saber escoger -dijo pensativo-
Pasaron algunos minutos antes de que encontrara las palabras exactas que quería reflejar.
-¿Te digo algo? -le suscité-
-Si porfavor -volvió a mirarme a los ojos con esa mirada-
-Esa elección es la que te enseñará.
El resopló aunque atisbe algún indicio de entendimiento, que se esfumó segundos después.
-Pero... quiero hacerlo bien, no equivocarme.
-Eso es imposible -dije con una sonrisa-
-¿Imposible? -se extrañó-
-Improbable -suavizé un poco- Te equivocarás -dije con fe de que lo entendiera-
-¿No me vas a ayudar verdad? -susurró mirando con detenimiento el suelo que pisaba-
-No, por tercera vez te repito que yo no soy la persona adecuada.
-¿Y quien lo es entonces?
-Tú -repetí- tú, tú y sólo tú.
-Quiero elegir bien el camino y aprender a vivir.
-Pues vive. Y hazlo ya.

Yo de mayor quiero ser cómo tú

Viajar, y estar en casa.
Reir, reir mucho y llorar poco, o llorar de felicidad.
Salir y entrar, y estar en cada sitio con una sonrisa.
Decir cosas bonitas, y verdaderas aunque parezcan crueles.
Bajar a lo alto del mundo y ayudar a los demás.
Tener ese espíritu, esas ganas, ese brillo color mar.
Conocer, conocer lugares y personas, y tratar a los que esten a mi lado con la ilusión del primer encuentro.
Saber perdonar y endulzar el día.
Correr y descansar satisfecha.
Amar y sufrir, desde la esquina de la humildad.
Aprender y olvidar, la simpleza del odio y la complejidad del viento.
Y valorar, ese segundo en el que tu sonrisa forzo a la mía a reir.
Y querer, querer mucho y a muchos.
Y visitar, aquel sitio, ese del que siempre hablas... Ese... ¿Cómo lo llamas? ¡Ah sí!
Futuro.

A tí, papá.

90, 91, 92...

Cuando me miras tan sólo quiero que me beses. Un poco más. Sí. Quiero tus labios, y tu mirada. Sólo para mí. Cuando me besas quiero irme lejos. Desaparecer. Contigo. Muy lejos. Allá donde Cenicienta perdió su zapato. Allá donde Blancanieves mordió la manzana y Shrek estuvo de vacaciones. Allí. Allí en los cuentos. Lejos. Lejos del bien, del mal, del cielo, lejos de cielo, del infierno, del purgatorio, de los peces en el río y los pajaros volando sobre el cielo. Allá muy lejos.
Pero quiero ganarmelo. Sí. Quiero aprender de tí y contigo. Quiero decir algo y equivocarme, y que luego me consueles con una de tus sonrisas. Quiero luchar por tenerte, saber que estás aquí, pero que puedes irte y dejarme. Y tener miedo. Quiero vivir. Con temor e ilusión. Y respirar. Respirar siendo libre imaginando tus brazos. Y otra vez luchar. Esforzarme. Luchar. Por las mañanas siempre luchamos por cinco minutitos más de sueño ¿Cierto? Bien. Bueno... yo lucharé por 90 besos más, por 91 abrazos más y 92 caricias tuyas. ¿Porqué? Lo estuve pensando. Al principio elegí un numero al azar, pero después me decanté por mi número preferido. Sí. Sin embargo me pareció demasiado poco, y sumandole ceros se veía algo bastante irreal. Así que haciendo cuentas me quedé en el 90. ¿Crees que digo incoherencias? Bueno, quizás lo haga. Dicen que estoy loca, supongo que será por algo. No quiero ni uno, ni dos, ni cinco, quiero 90. Sí. 90 besos, 91 abrazos y 92 caricias tuyas. ¿Demasiado? No te preocupes ni te agobies. Tenemos toda la vida. Lucharé por cada uno de ellos. En esa vida.

Cuando escribo me gusta imaginar. Volar un rato fuera de la tierra, subir al cielo, pintar las nubes de letras y aspirar el silencio. Volverme aire, mezclarme con los aromas del mar y dejarme ir por la brisa de la mañana.
Cuando escribo me gusta estar sola, y dejar que las musas vengan. Liberar mi imaginación y trazar en el papel ideas sin esconder palabras.
Cuando escribo esas ideas se agolpan en mi cabeza, tantas en tan poco tiempo que a veces consiguen agobiarme, entonces... huyo un rato del lapiz y el papel. Luego, más tarde, vuelvo a ellos con algo de música, que deleita mi pensamiento y da cobijo a mis recuerdos.
Y cuando vuelvo a escribir, y siento la textura del papel, cómo en este instante, me quedo mirando fijamente la punta negra y así las letras vuelan solas. Únicas. Tan fáciles de borrar y efímeras en el tiempo.

Memories

A veces me cuesta mucho. Y finalmente peco de desordenada y hago lo más simple. Aun así sonrió cuando me doy cuenta de que estoy recogiendo mi vida. Sí. Esa llena de instantes que se acumula día a día. El otro día abrí sin querer mi corazón y se derramaron los recuerdos. Tantos... tantos... tantísimos recuerdos. Llenos de risas, de magia, de engaño, de lagrimas, de palabras, de miradas... no es posible expresarlo. Tanta vida en mis recuerdos. Tantos ''eres especial'' y cientos de ''Habló quien pudo''
Y música, y letras, y miles de millones de imagenes en el mismo segundo. Y sonrisas que iluminan vidas. Y no supe hacerlo. Me costó demasiado.
Soy bastante torpe, en realidad el problema no fue recogerlos, sino ordenarlos. No hacía limpieza desde hace mucho, y claro, se habían ido instalando uno detrás de otro, sin más orden que ese. En el tiempo. Cronológicamente. Sin embargo, ahora que estaban en el suelo, no sabía cual guardar primero, eran tantos momentos mágicos... Era imposible. Incluso ahora es imposible. No pude ordenarlos ¿Cómo clasificar decenas de cachitos de mi vida según la importancia?
No. Ni pude ni puedo.
Al cabo de un buen rato cerré los ojos y los cogí todos de golpe. Los apretuje dentro de mi corazón y lo cerré con cuidado para no pillar ninguno. En ese instante sentí la vida. De nuevo. Fluyendo en mi interior. Me sentí feliz una vez más. La pega es que en mi cabeza seguía resonando un ''Y no supiste hacerlo''

Inocencia

Cuando un niño pequeño me mira creo quedarme atrapada entre su pureza, entre su ingenuidad, sencillez... entre su más humilde risa, libre y sin temor, los colores adquieren una nueva tonalidad, en la cual el mundo puede verse más limpio y alegre, y sonreimos pensando lo que un día fuimos.

Tic Toc

Y son este tipo de días los que hacen que necesite respirar. No es nada de mi exterior. Nada malo ni bueno. Es simplemente el tiempo. El angustioso tiempo. Ese que siempre está aquí. Me asfixia, me oprime ¿Para qué existe? De acuerdo. Hablemos claro. Debe existir. El tiempo es necesario, para contar las horas, los segundos, medir los días, los años, para tener un marco de referencia al que ajustarnos cuando nos preguntamos el porqué de nuestras vidas. ¿En qué vivimos? ¿Qué somos? ¿Adonde vamos? TODO está marcado, marcado por un tiempo, que nos rodea, que nos dicta un orden pero... ¿Alguien puede darme un poco de silencio? No me refiero a la ausencia de ruido, sino al silencio del tiempo. A la nada. ¿Alguien podría eliminar el tiempo de mi vida? Quiero tener mi propio ritmo, mi espacio, mi propia forma de contabilizar los momentos...
Parezco ilusa ¿Cierto? Bueno, no debo ser la única.

Cajoncitos*

¡Felicidades!
A tí, si si. ¿Porqué? Umm... bueno... ¡Que más da!... quiero felicitarte. Quiero agradecerte, decirte, contarte, cuidarte... ¡Felicidades! ¡Sí! No me mires así ¿Te parecen raras estas líneas? Sólo expresan mi entusiasmo. Quiero rasgar un poquito de tu amistad y guardarla para mí, en un cajón, pequeño, tengo muchos, los guardo en mi corazón, pero en realidad la mayoría están vacíos ¡Quiero llenarlos!
A ver, te explico, te felicito por vivir. Algunas personas suelen tener miedo a vivir. A veces hace daño, es cruel y tenemos que ser fuertes para levantarnos, pero finalmente vale la pena. Sólo por esas pequeñas cosas.
¡Felicidades! Sí, creo que ya me repito. Bueno... ¿De que hablabamos? ¡Ah sí! Puesto que tengo muchos cajoncitos, quiero guardar en cada uno un regalo... un regalo tuyo. En uno me gustaría que perdurara una sonrisa, en otro una mirada, una de esas que traspasan el corazón y te congelan en el tiempo, tambien el sonido de una risa, el color de cielo, al atardecer y al alba, y por último el olor de la brisa del mar. Tambien me gustaría guardar tu sombra, la más alargada que tengas, sí, y tambien la textura de tu piel y el miedo a la oscuridad. Bueno, con esas cosas creo que llenaría todos mis cajoncitos pero... ¿Puedo preguntarte algo? ¿Dónde guardarías tú tantos cajones?

Mátame

¿Puedo pedirte que me mates?
Mátame y hazlo despacio. Mátame, mátame de felicidad.
Ven, abrazame. Hazme sentir viva y quiéreme hasta perder la razón.
Hazlo poco a poco, para sentir como se me escapa la vida entre tus risas.
Mátame justo ahora. Quiero reir y creerme capaz de cualquier cosa. Quiero que me mates con tus miradas, que traspasan el amanecer y me duermen por las noches, mátame con una palabra, y hazme sufrir un poco. Sólo lo suficiente para darme cuenta de que me amas.

Mi ángel

Sólo es un ángel jugando a vivir.
Déjalo, déjalo que corra por el campo y se caiga, deja que se levante pero curalo después.
Haz que tome cada una de sus decisiones siendo consciente de todo lo que conlleva, dile que lo piense, que lo sienta, que haga lo que inunde su corazón, pero que escuche a su cabeza antes de lanzarse al vacío.
Enseñale a cocinar, déjale que se queme, y que se queje del dolor, luego besale la herida y susurrale un ''Así gastarás más cuidado la próxima vez''
Juega con el, haz que se duerma rendido de felicidad, haz que salte, y que crea que puede volar. Coge algodón, ponlo en sus manos y dile que el otro día se cayo un trozito de nube. Sonreíra.
Haz que sonria una y otra vez, pero tambien hazle llorar, y deja que aprenda a secar sus lagrimas. Sé constante, amalo, pero enseñale la amargura del dolor.
Déjalo, déjalo que viva, que se equivoque, déjalo que tropiece y que el brillo de sus ojos ilumine el mundo.

Un señor con sombrero

Tenía un plano en la mano pero me era imposible descrifrar todas las líneas impresas. Ví a un señor con sombrero y lo paré con amabilidad.
-Perdone ¿Tiene un segundo? Tengo un gran problema. Me anotaron mal la dirección.
Algo escéptico el hombre se detuvo y me miró.
-¿Disculpe?
-Sí sí -Afirmé ávidamente- Me dijeron que era todo recto a la izquierda -indiqué en el plano sin saber muy bien que señalaba- y a la izquierda sólo hay una puerta que conduce al olvido.
Vislumbre en aquel hombre un indicio de huida y confusión.
-¿Al olvido? -preguntó atusandose el bigote-
-Al olvido, a la decepción, a la tristeza -insistí- todo está oscuro... -intenté explicar-
-¿Y a donde quiere ir?
-Umm... -pensé un segundo- quisiera ir a algún lugar bonito... -concluí-
-¿Que le parece si le indico el camino hacia la montaña?
Negué con rotundidad.
-Necesito ir a algún sitio lleno de amistad, magia, amor e ilusión.
Una suave sonrisa apareció en el rostro de aquel señor con sombrero.
-Realmente no hay nada parecido cerca de aquí... -dijo en una picara negación-
-No importa lo que tenga que andar, es lo único que debo hacer para sentirme bien...
Él se mantuvo pensativo unos segundos.
-Bueno... ¿Porque no prueba todo recto a la derecha?
-¿Al contrario? -pregunté sin entender-
-Si claro -dijo haciendo desaparecer con un rápido movimiento el plano de mis manos- normalmente los opuestos suelen llevar a lo deseado.
Asentí rápidamente.
-De acuerdo, muchas gracias -afirmé estrechando su mano y comenzando a andar-
-Un segundo... -Inquirió el señor con sombrero- ¿Ústed... usted no es de aquí verdad?
Yo reí momentaneamente hasta contestar.
-No, yo... yo vengo del mundo de los sueños y en la realidad ando un poco perdido.

I believe

Creo en la brisa del mar.
Cuando me despeina y hace que sonria.
Creo en la textura de tu piel.
Cuando me susurras un 'te quiero'.
Creo en el valor de una mirada.
Cuando destruye la amargura del dolor.
Creo en aquel traje de payaso.
Cuando estaba triste y me regalaste una glor.
Creo en el brillo de tus ojos.
Cuando pinta de colores la oscuridad.
Creo en tí.
Sólo creo en tí.

Pasado

Miré mi reflejo en el agua buscando un tono claro, algo que brillara en mi cara. No lo encontré. Estaba apagada. Yo misma. Simplemente algo menos viva. Ese aire que traspaso mi corazón hizo que se fracturara un poquito. Un poquito más. Otro golpe. Otro de tantos.
Y pensar en el olvido. Y agradecer que ese trozo de mi vida siga enterrado en algún lugar de mi mente. Con vuelta doble de llave, para que no escape jamás.
Aparté aquel reflejo y me apoyé con fuerza sobre mi misma. Limpié las lagrimas que hicieron de aquella imagen algo turbio y mire al cielo.
''Si aprendes de tus fracasos, realmente no has fracasado''

Valor

Y fue en ese instante, cuando una palabra me hizo caer. Una palabra sin más significado. Fue entonces cuando sentí miedo, sentí temor, cuando miré mi vida desde otra perspectiva. Una perspectiva algo más árida y cruel, pensando en el daño que puedo llegar a hacer y las veces que soy capaz de caer y levantarme antes de cerrar los ojos y rendirme. Permanecí inmovil durante unos minutos, observando la pared, mientras que las ideas fluían en mi cabeza y hacían brotar lagrimas de mis ojos. De nuevo, la preocupación invadía mi ser, de nuevo, otra vez. Volví a darme cuenta de que el mundo sigue girando, quise que se parara un rato, pero sabía que no era posible. Que debía arriesgarme. Suspiré. Lo que una palabra puede provocar en mí. El valor de un ''adios''

Huele a felicidad

En aquella esquina de la cama, me acurruqué y comence a soñar. Cerré los parpados, percibí la oscuridad, respiré profundamente y soñe. Simplemente soñar. Esa noche soñe con el mar, con su brisa y con aquellos pajaros que sobrevolaban mi cabeza. Con los peces, y el aire, que envolvía mis cabellos, alocados y revueltos. Me sentí libre y pude percibir la textura de la arena. Sí. Aquella arena tan fina, dorada, que se colaba entre los poros de tu piel. Un escalofrio recorrio mi espalda ¿Síntoma de felicidad? Sonreí. Y mi imaginación volo hasta aquel mundo de los sueños. En el que no existe la mínima preocupación. Ni temor ni odio ni rencor... ni siquiera... ni siquiera tristeza. Y anduve por la orilla hasta darme cuenta de que nuestras manos estaban unidas, y comencé a reir y quise gritar alto palabras al viento y que las guardara para regalartelas una a una. Y vole muy alto, mi alma llegó hasta las nubes blancas que ocultaban un trozito de sol. Y ese sol comenzó a quemar mi piel. Y la tuya. Me daba calidez. Y allí me perdí. Despacio y sin agobios. Junto a tí. Dejando poco a poco mi huella en ese lugar tan hermoso. Sí. Y en aquella esquina de la cama, aquella noche, percibí el olor de la felicidad.

Lo prometí, y llueve

Y allí, sin darnos cuenta, el sol salió de su escondite e hizo brotar en el cielo un maravilloso arcoiris lleno de tonalidades, que invadió la inmensidad de aquel lugar y nos acompaño largo tiempo hasta que debimos marchar. Precioso, eterno, efímero, radiante, indescriptible. No sólo los colores, sino todo... el lugar, el paisaje, las pequeñas gotas cayendo sobre nosotros, los besos, tú, el color miel oscuro y el viento que quería derribarnos. Probablemente nunca volverá a ocurrir. Cierto, tienes razón. Sólo probablemente. Quizá algún día, quizá de nuevo... el sol decida volver a hacernos sonreir, y vuelva a colocar en el cielo ese lindo perfil de colores que han bañado de magia ese rincón.
Aun así, los más brillantes amaneceres, los más románticos atardeceres, los paraisos más increibles se pueden encontrar siempre en el rostro de las personas queridas :)

Fairy tales*

Un día abri aquel libro, y comencé a leerlo con entusiasmo. Un cuento de hadas, de estos de colores, con finales felices y bonitos que idealizan la princesa y el principe, y el castillo. Cuan maravilloso parecía aquel castillo, lleno de torres y de arboles que daban frutos. Uno de esos cuentos en los que siempre hay un villano, y en los que siempre acaba encerrado en la cárcel. Uno de esos que parecen de ensueño, llenos de magia e ilusión. Bueno... pues comencé a leerlo y me gusto. Se lo leí a muchas personas y a ellas tambien les agradó, pero un día, sin saber porqué, el cuento fue cambiando, el libro seguía intacto en aquel rincón de la estantería, pero el cuento había obtenido otra tonalidad, no me refiero a los colores, sino a la historia. La última vez que lo leí resaltaba un ''Y comieron perdices''... pero ahora... ahora sólo había un triste ''fin'' pintado con unas letras oscuras en mitad de la página. Suspiré. Al fin y al cabo, todo termina cambiando. La vida misma. Tantos colores parecen rodearte y de pronto, en un instante, se dibuja un ''fin'' delante tuya. Y fue así, cómo nadie volvió a leer aquel maravilloso cuento.

Justo ahora

Justo ahora... una sensación me rodea, es una sensación cálida y de optimismo. Todo saldrá bien, y si no lo hace, con el tiempo, mejorara y hará que las cosas valgan la pena. No me preguntes porqué. Quizá debo dejar de pensar. Sí, simplemente dejar de pensar y concentrarme en lo importante. Ahora son los examenes y las risas que me envuelven a diario. Risas de personas que lo merecen todo porque me lo dan todo. Incluso la vida y las ganas de volar. Metafórico ¿No?
Espero que esta sensación me dure algunos minutos más... o quizá unas horas, o unos días... me siento bien así.
''Cree en lo imposible, y harás lo increible'' :)

Gotas de vida

LLueve. Fuerte. Decididamente. Parece querer arrasar con las flores y la cálidez de la estación. Quizá lo esta consiguiendo... bueno, sólo es lluvia. Gotas. Me he asomado a la ventana y he dejado que la humedad empape mi cara, inconscientemente mis parpados se han cerrado y el aire me a susurrado al oido la palabra libertad. Sin embargo, todas esas pequeñas gotas que se están estampando contra el cristal, dentro de poco tiempo se irán. Sólo es lluvia. Relampagos. Tormenta. Un sonido que parece querer romper el cielo pero que... en pocos segundos se va, para después volver. Una cosa... otra... otra... al fin y al cabo sólo es una noche con una brisa algo fría. Bueno... al fin y al cabo todo es efímero ¿No? Hagamos que perdure este momento.

El futuro tiene muchos nombres. Para los débiles es lo inalcanzable. Para los temerosos, lo desconocido. Para los valientes es la oportunidad.

Presión

Bueno, y aquí estoy otra vez hablando conmigo misma. Últimamente me pregunto por el futuro... y por el tiempo que tengo hasta que se me eche encima. Tengo la extraña sensación de que me gusta más el presente, quizá no estos días, pero creo que me gustaría seguir así un tiempo. No se, cambiar de rutina siempre se me hace cansado y acaba por amargarme. Sólo espero disfrutar. Contigo. Con todos. Antes de que el tiempo vuelva a susurrarme que puede hacer lo que quiera y manipular mis acciones a su voluntad.

Ahora

Paciencia.
Debo tener paciencia. Esfuerzo. Dedicación.
Se alejan, las oportunidades de cazar sueños, así que... despacio... con paciencia... lentamente.
Ahora.
El mañana... vendrá luego.
Quizá debas comenzar a luchar por tu futuro, es el lugar donde pasarás el resto de tu vida...

A.T

Welcome to the theather
Welcome to our wonderful world of happyness and magic
¿Are you gonna enter?
Welcome to the grins, to the shouts, to the people and their magic words.
Welcome to my world, to your world and to our world.
¿are you gonna stay with me?
I promise you amazing plays and lovely music... and... maybe...
not!
not maybe!
FUN!
I promise you fun, and time, and music, and dance.. and... and friends of course.
And that feeling in your heart... how explain? It's A DREAM :)

Por último, por último quiero decirte a tí, que sin esa sonrisa no podría vivir. Que es bella, que es pura, que roza el límite de la ilusión y me deleita con imagenes que me infunden tranquilidad.
Que quiero que la luzcas más a menudo... que rias, que lo hagas mucho, que sin ella no sé vivir...
y claro... obviamente que tú, sin tu sonrisa... no eres tú.
¿Me lo prometes?

A mis vidas

Quiero que mis palabras lleguen hasta las personas a las que escribo. Si digo... ''derramamos café'' yo se que tú me entederás. Y si digo mi M de MASH tambien sé que tu me entenderás, si digo mamu tambien ¿verdad? y si digo que no perderás nunca tu honra es obvio a quien va ¿No? Bueno, pues a vosotras cuatro. A las cuatro personas más maravillosas del mundo, a vosotras... vosotras que siempre estais ahí, que me escuchais, que me aguantais... se crea un vacio aquí dentro cuando no estais cerca, cuando por alguna razón os alejais... es increible. Me dais la vida... pero sólo quiero vivirla, si estais junto a mí. Aver como decirlo... ah si, ya sé OS QUIERO :D
Por cada instante, cada sonrisa, y cada lagrima, y por cada abrazo, y por las locuras juntas, y por dejarme que entre en vuestras vidas, y por darme un tortazo cuando lo necesito ;) y volar conmigo e ir a la luna, por enseñarme la roca :D y por hacerme sentir que la vida merece la pena, por hacerme ver que las cosas salen mal, pero que debes aprender, por hacerme saber que sólo puedes ser feliz si SMILE ! :D:D
Podría continuar hasta el infinito... en realidad sabeis que todas podiamos seguir hasta el infinito... pero el infinito queda lejos... y yo quiero teneros cerca, para sentir vuestro calor (L)
A todas, y lo sabeis, no esque esteis en mi corazón, esque lo sois ;)

''(...) Siente la llamada de la libertad, rompe las cadenas que te hacen llorar, carretera y manta, no lo pienses más, salta, rie, baila, escapa.. que la vida se acaba, que los sueños se gastan, los minutos se marchan (...)''

Un sinfin de palabras

Te voy a dedicar... palabras. Quizá no las puedas tocar, quizá no puedas llevarlas de un lado a otro en el bolsillo... pero podrás llevarlas en tu cabeza... o en tu corazón o en tu alma... sólo quiero que te protejan.
Sin embargo, no encuentro las correctas.
Bueno... quizá sí, pero esque son tan ínfimas comparadas contigo...
A ver si consigo explicarme... ¿Cómo empiezo?
Pues por las noches siempre me duermo pensando en tí, y cuando me levanto, sin apenas darme cuenta, ya está tu mirada dentro de mi cabeza. Esa que me hace sonreir.
Veamos... ¿Cómo decirlo? ¿Aparte de decir un te quiero?
Por haber llegado, lo has cambiado todo, lo has hecho tú sólo. Y no te rendiste. Porque eres grande. Tanto que no puedes hacerte una idea de cuanto te quiero. Me he dado cuenta de que ni siquiera yo misma lo sé. Es ... es cada instante, cada segundo que te tengo cerca, me llenas, cómo un globo, me inflas... me inflas de felicidad ¿Cómo lo consigues? No creo que sea sólo porque te quiero, es... porque eres especial... esta... esta sensación que te despierta en mitad de la noche y hace que rias, que te sientas feliz, que esa ilusión invada tu cuerpo... hasta que te vuelves a dormir con el móvil en la mano. Por la mañana te despiertas y te maldices, tendría que haberte contestado... Sólo espero que mi esencia haya volado hasta tu cabeza diciendo un TE QUIERO bien fuerte que resuene en tus oidos. Tu piel... tu piel es tan suave.. tu, tu eres tan lindo... tan hermoso, una luz en el camino, tu sonrisa... tus palabras... (L)
Te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, Te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, Te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, Te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, Te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero... (...) ¿Te quedó claro enano? (L)
''Un sinfin de colores para pintarte,
un millón de palabras para describirte,
tan sólo un silencio con el que poder pensarte,
tan sólo una excusa con la que poder besarte''
Tan sólo un instante... (L)

Oscuridad

El ser humano es el ser más estúpido, frágil e impasible que existe. Comprendo que te caigas una vez, y otra, y otra y otra... pero no comprendo que cuando te levantes vayas a parar al mismo sitio, sabiendo que está la piedra ahí. Creo que ya tengo la respuesta. Estás cegada ¿No? Algo tapa tu visión y por eso no puedes ver que el obstaculo esta ahí. Bueno... yo no puedo hacer nada, ni siquiera quitarte la venda sirve, porque tu misma te la vuelves a colocar ¿Porque te gusta dañarte? No lo entiendo. Una cosa, millones de ellas. Nunca lo entenderé. Ya desapareció. ¿No te das cuenta? Tu corazón está tan dañado que no sirve, no reacciona... bueno... yo ya intente repararlo... le puse muchas tiritas y abrí las heridas que quedaban para poder repararlo a fondo, pero tú te empeñas en mantenerlo medio construido. Al fin y al cabo, haz lo que quieras, es tu vida. Es tu corazón. Yo sé cuidar del mío.

Live

Quisiera poder gritar en mitad de la calle y que mis gritos sólo llegaran a tu cabeza.
Quisiera poder llorar y reir al mismo tiempo, y provocar en los que me rodean sensaciones similares.
Quisiera cogerte de la mano y volar, intentar saltar y desaparecer del mundo, sólo tu y yo.
Quisiera reuniros a todos, dentro de una nube, y hacer una fiesta, con espuma y algodón.
Quisiera que se parara el tiempo... esa odiosa presión constante que está detrás de mí.
Quisiera... tu perfume, el que embriaga tu cuello cuando lo beso.
Quisiera... poder encontrar... justo las palabras adecuadas para describir a cada persona sin dejarme nada atrás.
Quisiera estar segura de que sabeis que os quiero.
Y con todo esto, sólo quisiera... vivir.

Nostalgia

¿Me odias? ¿Oh si? Venga, demuestramelo. Me da lástima en lo que te has convertido. Tantos momentos juntos, para esto. Para que apartes la cara cuando me ves ¿Sabes qué? En realidad le hablo a tu pasado, porque ahora, tú, tu no eres nada de lo que yo conocía. Pese a todo te doy las gracias, por todos los momentos vividos y todo lo que he aprendido gracias a tí. Intentaría ayudarte y traerte de nuevo a nuestro lado, pero me di cuenta de que decidiste escoger tu propio camino, ese que está marcando tu futuro. Sí, me di cuenta de que te alejaste, y ahora quizá, quizá sea yo la que te odie. El tiempo hace estragos con la gente, y la vida más aún. Pese a eso, aquí, recordando aquellos momentos, te doy las gracias.

Sin más

Es esa sensación de que te necesito. No sé... son mis latidos al saber que te tengo cerca, son tus miradas, las mías, son tu besos consentidos, y los que me robas, son tuyos... es algo... dificil de explicar... digamos que... llegaste y lo cambiaste todo. Tanto... tanto que ahora no me imagino sin tí. Quizá este exagerando pero esque... ¿Porqué demonios estas siempre y siempre y siempre en mi cabeza? Ah si... Ya tebya lyublyu!

Poema 15

Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.

Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.

Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
déjame que me calle con el silencio tuyo.

Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.

Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.

PABLO NERUDA

Loca, pero loca por tí

Tú. Quizás aquella palabra fuera la que rompiera la barrera de la ilusión. Aquellas palabras que duran poco y valen tanto... no sé. Verte aquí. Una vez más, tus abrazos, tus miradas, tus besos... sólo se me ocurre una palabra para describirlo: magia.
Esa de la que están hechos los sueños, los comienzos, la que recorre tu cabeza en este instante ¿Sientes la magia? En realidad no es complicado, sólo tienes que estar enamorado. Ese sentimiento que va y que viene, cuando estamos con alguien, creemos que nada cambiará y que las cosas seguirán así, sin inmutarse, hasta que descubres que el futuro es mejor ¿Cómo explicarlo? Es algo nuevo, diferente, que te llena mucho más que el pasado, que hace que suspires, y que sueñes, pero que sueñes feliz, cómo tonto embobado mirando el tiempo.
Es eso... a los que ciertos locos llaman amor.

Aquella chica de ojos azules

Algún día te agradeceré todo lo que haces por mí, algún día, no se cuando ni cómo, haré que tus labios no se cierren y que rias sin parar, sin aliento, que me rueges que pare. Bueno, quizá eso intento a cada momento, eres tan pura, no sé ¿Cómo describirlo? Estas ahí, sabes lo que importa, y lo que no, haces que la vida valga la pena, exprimes los pequeños momentos, y los malos los desechas, si tienes que sufrir y llorar, llorarás, pero siempre intentas hacerlo dónde nadie se quede presa de ese sentimiento, yo estaré a tu lado para abrazarte... así, sin más. Un abrazo dice tantas cosas que las palabras no son capaces de expresar... Pues yo quiero volar, quiero hacerlo contigo y para siempre, no sé... nunca vengarás tu honra, porque nunca la perdiste :) de hecho es sólo tuya ¿O acaso lo dudas? Cada una de nuestras miradas, esas que parecen de crías y sólo nos aportan risas instantes después, cada una de ellas, la cree sólo para tí.

A tí, Alba
Yo te examo mucho ;)

Tú

Hoy. La magia inundó ese lugar. Ilusión, fantasía... sólo tu mirada ahí delante. Esos ojos que lo dicen todo. Y una palabra. Y un susurro. Y un latido, podía sentir tu pecho y palpitando tu corazón. A gran velocidad, en una burbuja de cristal, imaginaria, de esas que parece que lo envuelven todo, sólo estabamos tu y yo. Alejados de las calles y la ciudad. En ese lugar que tanto se nombra y que parece fantástico, pero en realidad sólo es un lugar, aunque hoy, hoy adquirió otra tonalidad. Se convirtió en el lugar. En nuestro lugar. Tambien estaba la constante presión del tiempo ¿Te arrepentiste? Si lo hize, no me lo recuerdes más. No importa. Ahora sólo importa la expresión de tus labios, y tu cariño. Ahora puedes olvidarte de lo demás. No te alejes. No te alejes nunca, porqué estoy empezando a creer que te necesito más de lo que pensaba.

Un pétalo de amor

''En aquel lugar. En aquel lugar tan maravilloso, tan inmenso, puro, embriagador, libre de desengaños y transmisor de vida y paz, sólo en aquel lugar, se sentía libre y feliz. Era tan perfecto, tan hermoso, simplemente mágico. Notó la calidez de sus manos sobre su piel y una pícara sonrisa se escapó de su rostro. Era él. Sólo el. Aquel lugar y él. Lo único para ser feliz y sentirse plena. Todos los días por la tarde se repetía la misma escena, en aquel prado lleno de flores de colores, se encontraba siempre ella, bañando su rostro con la brisa del viento y cerrando los ojos esperando algún sonido que la trajera de vuelta a la realidad. Se estaba bien allí. Todo era fantastico, los animales paseaban y saltaban con habilidad entre las ramas de los arboles, el rio fluía cerca, tanto que se podía percibir cómo la corriente chocaba contra las rocas, las nubes volaban sobre su cabeza, y a veces se entretenía en contar cuantas eran y qué recorrido hacía cada una de ellas... Paz. Aquel lugar simplemente le transmitía paz, y cuando él estaba cerca, la felicidad desbordaba los límites conocidos. La húmeda hierba le delataba, a él, haciendo que ella fingiera no saber que rondaba por los alrededores. Sólo para hacerse la sorprendida. Pero ese día, ese día fue real, no lo sintió, ni oyo nada, quizá estaba demasiada absorta en su propio mundo personal, en el mundo de la imaginación, ese de los sueños, que siempre volaba por su cabeza cuando se encontraba allí. La cálidez de sus manos le produjo sensación de seguridad y bienestar, se giró para mirarlo, pero segundos antes pudo sostener en sus manos una preciosa flor. Viva, de colores, pequeña y de aspecto frágil, pero hermosa. No recordaba ninguna igual, y no eran pocas las que había examinado, de tantos colores y texturas. ''Cada uno de los pétalos, será un beso para tí amor, para cuando lo necesites, para cuando me necesites'' Prometió él ''Estés donde estés, hagas lo que hagas, si deshojas la flor, si arrancas un pétalo, uno de mis besos volará hacía tí, tarde o temprano'' Un te quiero salió de los labios de ella antes de fundirse en un beso. Cuan bonito fue aquel momento, de esos que no se olvidan, de esos que tardan en salir de la cabeza, de esos que te mantienen viva y llena de alegría durante un buen tiempo. Un beso, y luego otro. Quizá otro, o tal vez aquello fue todo. Los pétalos de la flor se fueron agotando, un día que estaba triste, arrancó un pétalo y justo instantes después el apareció por la puerta, y ambas almas se unieron. De nuevo en otro lugar, en otro momento, cualquier cirscunstancia. Hasta que el destino decidió barajar las cartas y jugar con el futuro de estas personas. Es caprichoso, quizás cruel y altivo, ruín, o maravilloso y esperanzador. Despedida. Él tuvo que partir. Separarse de ella. No fueron suficientes las lagrimas que derramó para evitar que se fuera, no fueron suficientes una y otra noche. Al final se marchó. Pero en esa pequeña flor quedaba un pétalo. No se sabe porqué, o cual fue el pensamiento de ella, para no terminarla de deshojar. La guardó. Cómo preciado tesoro poseedor de riqueza y fortuna. En un cajoncito, que llevaba siempre encima.
Tiempo. Los días, los meses... los años fueron pasando. Y un cierto día, presa de la nostalgia volvió a aquel lugar. Todo resurgió en ella. Seguía siendo fresco, y la calmaba, producía paz interior. Se sentó de nuevo y estuvo horas, horas que se pasaron cómo minutos. Era esclava de los recuerdos, los arboles y la brisa del rio le recordaban a él, todo a él. A su mirada, a su piel, su cálidez, sus sonrisas, a sus besos... .Todo. Cerró los ojos y creyó sentir su piel, una vez más, pero los abrió y vio que su imaginación se encargaba de engañarla cómo a un niño sobornado por caramelos. Sacó de su bolsillo la cajita y por última vez arrancó la última espina de la promesa hecha años atrás. Una lagrima cayó en ese instante. Algo susurró en su oido un te quiero, pero se escapó la realidad y pensó de nuevo en su estúpida cabeza, que sólo producía alucinaciones. Unas manos taparon su rostro, ella rió pensando cuan real podía ser su locura, y sin creerlo, se dió la vuelta y el tiempo se congeló, los animales dejaron de moverse y el rió de fluir, estaba ahí. Él. Lo miró fijamente, y una sensación de añoranza inundó su pecho. ''El último pétalo'' Sonrió él ''Lo prometido es deuda. Te debía un beso'' Entonces el tiempo comenzó a avanzar y sus labios se unieron, para no separarse nunca más. Después sus manos sostuvieron un pequeño saquito, ella lo abrió con timidez ''Es un saco de semillas. Para que nunca dejes de deshojar flores pequeñas llenas de pétalos'' Y fue justamente en ese momento. Real. Único. Cuando la promesa se cumplió''