Salvarle a alguien la vida para destrozársela tú.


sábado, 28 de enero de 2017

Nos hacemos grandes partiéndonos poco a poco.

La imagen puede contener: una o varias personas y texto


''Contemplé por un segundo a Nora en su erguida, orgullosa y acorazada fragilidad. Su pecho se agitaba y aguardaba una respuesta. La certeza crecía inexorable en mi corazón; no nos amábamos.
Lo nuestro sólo era una mimada y preciosa relación tóxica, un idilio por dependencia, una de esas proyecciones autodestructivas que pasan una sola vez en la vida.
Pero no era amor.
El amor debía de ser otra cosa: un sentimiento equitativo, una serena certeza del otro, follar de un modo más empático y gimnástico, tenerse en cuenta, reducir la ansiedad, acompañarse de la mano a las revisiones médicas. Y no aquel interminable juego de espejos e ilusiones, adivinanzas y psicología inversa, esconderse y desearse, la dolorosa erótica del desplante que impregnaba cada idiosincrasia de nuestra relación.

No, aquello no podía ser amor.

Y entonces yo dije;
-Te quiero.''

[...]






No hay comentarios:

Publicar un comentario

Mi foto
My madness keeps me sane.