Porque joder, vaya rompecabezas que tengo ahí montado sin ti.
Y te vas y se me descolocan todas las piezas y no encajan y pierdo.
Pierdo la vida que me das cuando estás y cuando no estás también.
Todo.
Que te quiero con un cuerpo que no piensa. Y perdona si alguna vez me dejo sucumbir por esa sutil caricia que dan tus dedos cuando me tocan. Perdona si a veces no puedo contener esa niñería y te beso y no dejo de besarte. Perdona si te miro cuando estás dormido y me acuesto sobre ti.. porque ya sabes lo que dicen... qué bonito insomnio si me desvelo sobre tu cuerpo.
Me enamoré de ti.
Y no estoy contigo porque no haya otros.
Estoy contigo porque te elijo. Cada día que despierto, cada día que nos peleamos o nos enfadamos el uno al otro o nos decepcionamos. Te elijo una y otra vez cada día de mi vida.
¿Eso es lo que el amor hace, no?
Te hace más de lo que eras, más de lo que tan siquiera pensabas que podías llegar a ser.
Escribo desde la cama .
Desde una ciudad donde parezco desaparecer.
Esto es simple: escribo.
Y deberíamos estar amándonos.
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